"La Gran Rateada Mendocina "
Poco antes que la
primavera árabe y las marchas de los
indignados en España, una multitud de
jóvenes mendocinos había decidido no asistir a la escuela para reunirse en una
plaza a festejar, para ello se autoconvocaron utilizando las redes sociales,
eligieron como herramienta de comunicación una tecnología disponible a la que
ellos estaban habituados sin sospechar las consecuencias que tal acto implicarían -
Hernán, de 17 años,
junto a Pablo (16) y Melisa (14)
alumnos de una escuela
Mendocina, deciden armar un grupo en
Facebook bajo el lema "...Colamaremos la Plaza Independencia..."- con
la siguiente pregunta-consigna: ¿Quién se prende a la gran rateada Mendocina?
El nombre del grupo
fue la misma pregunta que a su vez generó el hecho: al modo de las profecías
autocumplidas, al mes contaban con más de 12000 seguidores intercambiando ideas para la organización,
finalmente el Viernes 30 de Abril del 2010 más de 3000 estudiantes se reunieron
en la Plaza Independencia, la gran "juntada" como ellos le llamaron,
dejando literalmente vacíos cursos enteros, y hasta escuelas casi desiertas-
Luego de la Gran Rateada este grupo llegó a tener más de 100.000 seguidores.
La
"Juntada" ocurrió sin incidentes, se fijó un horario de 8 a 18, y todo sucedió en un
clima de armonía entre mates, tortitas, guitarras y pelotas..."
El hecho tuvo enormes
repercusiones mediáticas: fue tapa de
los principales diarios provinciales, nota de todos los diarios nacionales y hasta apareció en la BBC de Londres y otros medios europeos.
Después de tal suceso
, los organizadores decidieron ir por más y programaron otra rateada para
Agosto, y una "Gran Rateada " para fin de ese año-
Al otro día distintos
grupos se estaban abriendo espontáneamente en FB con la misma consigna:
estudiantes de los departamentos mendocinos de San Martín, San Rafael y Maipú; a la vez que
en otras provincias del país: con
la consigna de "seguir el ejemplo menduco", empezaron a aparecer
nuevos grupos llamando a organizar
rateadas: San Luis, Córdoba, San Juan, hasta llegar al punto de convocar a una
rateada nacional para el día 26 de mayo aprovechando los feriados y festejos
del bicentenario- También en Uruguay más
de 24.000 estudiantes dieron su apoyo a una convocatoria online para una
"rateada nacional".
En poco tiempo, más
de 40 iniciativas replicaban la propuesta en toda la Argentina, con una
expansión viral inusitada y una disposición al acto nunca antes vista.
La Direcciòn General
de Escuelas de la Provincia reconoció que “..no poseía herramientas para
controlar estas situaciones...”, los docentes, directivos y padres de muchos estudiantes se encontraban
consternados ante la magnitud de tal evento,
la impotencia de sus posibles intervenciones para controlar a sus hijos
bajo el esquema disciplinario de la escolaridad obligatoria
puso en jaque los mecanismos sociales mediante los cuales se normativizó la
función de ciudadanía como una forma de construcción subjetiva homogénea y
disciplinada de los individuos que los
disponía como masa informe al molde social. Este esquema escolar, al entrar en
evidente disonancia con las prácticas , representaciones y modos de interacción
de estas nuevas generaciones de jóvenes, colapsa bajo las formas novedosas en
que los colectivos se conjugan para manifestarse.
Podría pensarse que
tal acto obedece al espíritu inquieto y rebelde del adolescente indisciplinado
que intenta transgredir las normas, a pesar de haber autodenominado tal
iniciativa como “rateada”, quizás por no
encontrar significaciones para nuevas
prácticas que son significadas
con viejas palabras , donde antes el
objetivo de la fuga era, intentar que el hecho pasara desapercibido. Las
rateadas eran silenciosas, en la mayoría
de los casos anónimas y con la complicidad de pocos para no ponerse en evidente
falta ante el doble orden disciplinario
de la Escuela y la Familia.
Este nuevo fenómeno
reviste características mucho más similares a las de una manifestación política
que a la de una rateada escolar: organización, discusión, movilización masiva,
liderazgos horizontales, formación de consensos entre muchos participantes de
distintas escuelas, objetivos claros de participación, definición de grupos de
pertenencia, y todo ello sin mediar recompensa más que la de la propia
participación, el reconocimiento de los pares,
y la legítima convicción de estar
haciendo algo mucho más significativo que ir a
la escuela.
Finalmente el
resquebrajamiento de las estructuras simbólicas que mantienen sólidos los lazos
entre las instituciones disciplinarias: Familia-Escuela no pudieron contener el
caudal que estas nuevas configuraciones subjetivas de los estudiantes abrirían bajo el marco de nuevas prácticas y representaciones, armados
de poderosas tecnologías: redes
sociales, celulares y computadoras.
Algunos padres desesperados, decidieron convocar a
los abogados de una ONG de “Defensa al consumidor” para que protegiera sus
derechos como ciudadanos, en clara
evidencia de las significaciones de una sociedad a escala de un mercado donde
los consumidores no estaban conformes con el producto que les vendían: de
comunidades auspiciadas por marcas de compañías de comunicación móvil donde los derechos se resumen en el decálogo
del consumidor: derecho al consumo, al uso del producto adquirido, derecho a la garantía de satisfacción que ese
producto ofrece hasta su pronta obsolescencia.
A los padres no les
satisfizo el producto “Escuela” que garantizaba
el dominio y adecuación de sus hijos así como se adecuaba el Súbdito al
Soberano o el Ciudadano al Estado- Ahora en este producto que representan sus
hijos, ya no hay garantías, por ello nada mejor que los abogados de una
organización protectora de los derechos del consumidor para intervenir en el
caso-
El Juez
El juez mendocino
Alfredo Dantiacq Sánchez ordenó a Facebook cerrar los grupos creados por
menores de edad que tengan por objeto promover la falta al colegio sin el
consentimiento de los padres. Las instituciones Deben recurrir a la instancia disciplinaria más explícita dejando ver los
engranajes de la máquina que mueve todo el mecanismo: la Justicia
institucionalizada de las cortes y tribunales-
Interceden ante un
Juez a través de los abogados de una asociación defensora de los Derechos del consumidor ;
El Juez establece la
medida cautelar ampárandose entre otras, en
la siguiente legislación:
“Constitución
Nacional Artículo 42.- Los consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen
derecho, en la relación de consumo, a la protección de su salud, seguridad e
intereses económicos; a una información adecuada y veraz; a la libertad de
elección y a condiciones de trato equitativo y digno.
Las autoridades
proveerán a la protección de esos derechos, a la educación para el consumo, a
la defensa de la competencia.(...)...”
Básicamente, el derecho a la educación para el consumo es
el que ampara a los padres e instituciones escolares con el auxilio del
Estado, concibiendo un modelo que
legitima y establece el derecho de los ciudadanos a educarse para consumir, en
evidente antagonismo con el acto de ciudadanía que protagonizarán estos
estudiantes reivindicando el encuentro en un espacio público, deslindados de
toda previsión y control.
Tal vez como
consumidores defectuosos, que han decidido no acatar las formas del modelo educativo vigente y
expresarse en un acto de desacuerdo plenamente legítimo, que como menores
tutelados y bajo las viejas formas de control del estado y la familia se les
priva de derecho pleno para ejercer estas prácticas que por otro lado se les
reclama cuando se les exige mayor compromiso ciudadano y participación
política.
Gilles Deleuze nos
recordará que el entramado de fuerzas que se juegan en una comunidad puede ser
entendido como un conjunto de líneas: algunas Molares, algunas moleculares o
levemente particulares y otras tan singulares que son consideradas “líneas de
fuga”, el poder representado en la forma de las fuerzas molares siempre intenta
sobre-codificar las otras líneas para sobre-imprimirlas y entramarlas al
sentido y significaciones hegemónicas de un conjunto social. Bauman nos dirá
que la práctica privilegiada del
actual período socio-histórico que él
denomina Modernidad Líquida es el Consumo, y en tanto consumidores nuestras
prácticas privilegiadas son las que representan ese modelo ; Bauman nos
recordará además que de las prácticas
se derivan formas que el denominará
“praxeomórficas”, en tanto modos de simbolizar el mundo tal como estamos acostumbrados
a hacer las cosas, estos “modelos
praxeomórficos” establecen matrices simbólicas desde las que pensamos, no es
casual en este caso que la legislación
que ampara a los padres sea una legislación que protege
los derechos del consumidor-
Si atendemos al
sentido y el nombre del lugar: La Plaza
Independencia , punto de encuentro de estos estudiantes tal vez hallemos una pista para pensar de que
pudo haberse tratado todo esto, solo de que pudo haberse tratado, porque las
oportunidades necesitan ser abonadas de intenciones y esfuerzo para que
prosperen.
¿Será tal vez que los
viejos ideales revolucionarios que animaron a los Franceses a emanciparse del
Soberano, de un poder despótico,
irracional y desproporcionado, y reemplazar la noción de súbdito por el
concepto de ciudadano emancipado, el que anime a reconstruir la vieja idea de
la fraternidad universal entre los habitantes del mundo ?
Para ello es necesario sobre todo intentar hacer las
preguntas correctas más que buscar respuestas :
¿Como re-conducir el
enorme potencial que despierta la participación en red, hacia un territorio de
reconocimiento que transforme las prácticas de consumo por otras que tiendan a la jerarquización
intersubjetiva en virtud de la producción de
bienes de conocimiento ?
¿Cómo es posible
generar prácticas de participación que
empoderen a estos estudiantes para generar pensamiento crítico y capacidades
reales para defender sus derechos como ciudadanos y no solo como consumidores?
¿Cómo estimular, y
generar eventos en los que la institución educativa brinde el marco de
emergencia para estos fenómenos, para que los estudiantes sientan el espacio
institucional como propio, igual que sintieron el espacio público de la plaza ?
¿Cómo maximizar las
habilidades que los jóvenes estudiantes poseen para que puedan apropiarse de los conocimientos y
capacidades suficientes en pos del
reconocimiento pleno de las posibilidades y límites que estas tecnologías
plantean ?
¿Cómo pensar el
aprendizaje?
Tal vez como una función adaptativa, en tanto los sujetos
aprenden en la medida que entienden el propósito de lo que hacen e interiorizan
el sentido de las nuevas prácticas, sobre el potencial cognitivo que a su vez
despliegan y construyen con sus pares -
¿Como generar
prácticas tendientes a desarrollar el potencial cognitivo intersubjetivo, que
estimule y favorezca el desarrollo comprensivo de estas nuevos fenómenos
sociales para intervenir en ellos como
sujetos críticos, transformadores, y de pleno
derecho en pos de generar mejores condiciones de distribución de los
capitales simbólicos, sociales y
económicos para los miembros que integran la comunidad toda ?
En definitiva: ¿Como
en vez de intentar perseverar en las
viejas instituciones sobre la base de la negación de las nuevas prácticas y
subjetividades, entrando así en
disonancia con los usos sociales
vigentes, no intentamos recrear las condiciones emergentes en los nuevos
contextos dentro de las instituciones escolares
para pensar entre todos un modelo más
comprensivo y amable que posibilite y reconozca la diversidad, el
talento, la creatividad, el conocimiento y la solidaridad como valores a jerarquizar más que el
consumo como práctica privilegiada
y el dinero como significante hegemónico
?
Oportunidad Perdida
¿Podrán ser algún día
reconocidos los estudiantes como
ciudadanos plenos de derecho , mas que como personas sujetas a tutela ?
“...Lucas González,
uno de los creadores del grupo "¿Quién se prende a la gran rateada
mendocina?", que sumó más de 13.500 adeptos en Facebook, admitió a BBC
Mundo que le "sorprendió la convocatoria y el montón de gente que
había" en la plaza céntrica donde se citó a los adolescentes.
Según González, la
idea era simplemente "pasar un buen día viernes".
Sin embargo, al ver
la repercusión –y las críticas negativas- que surgieron tras el primer faltazo
en Mendoza, algunos de los organizadores expresaron arrepentimiento por la
iniciativa.
"Por mi parte no
organizo más. Todo lo que hemos producido (…) no es nada bueno", señaló en
su perfil de Facebook Hernán Griffouliere, uno de los promotores.
El joven, de 17 años,
agregó que desistía de participar en una "rateada nacional" que
algunos están organizando para fines de mayo. ..” BBC Mundo
He aquí El orden
Molar sobrecodificando la fuerza insurrecta del cambio, los conjuntos sociales
como sistemas de donde emergen propiedades singulares y eventos novedosos-
Podemos seguir
temiendo al fuego como los animales salvajes, escondidos en nuestras oscuras
madrigueras mentales o dominarlo y seguir acompañando las transformaciones que
de todos modos sobrevendrán, como sobreviene el día tras la larga noche-